Los fabricantes de equipos originales también trabajan de la mano con socios tecnológicos para desarrollar soluciones con poca o ninguna codificación que permiten a los usuarios de todos los niveles de habilidad programar un robot.
El software fácil de usar emparejado con una experiencia de usuario intuitiva reemplaza una amplia programación de robótica y abre nuevas oportunidades de automatización: las nuevas empresas de software están ingresando a este mercado con soluciones especializadas para las necesidades de pequeñas y medianas empresas.
4. Inteligencia artificial (IA) y automatización digital
Impulsados por avances en tecnologías digitales, proveedores de robots e integradores de sistemas ofrecen nuevas aplicaciones y mejoran las existentes con respecto a la velocidad y la calidad.
Los robots conectados están transformando la fabricación. Los robots funcionarán cada vez más como parte de un ecosistema digital conectado: la computación en la nube, el análisis de big data o las redes móviles 5G proporcionan la base tecnológica para un rendimiento optimizado. El estándar 5G habilitará la producción totalmente digitalizada, haciendo obsoleto los cables en el taller de trabajos.
La inteligencia artificial (IA) tiene un gran potencial para la robótica, lo que permite una variedad de beneficios en la manufactura. El objetivo principal de usar IA en robótica es gestionar mejor la variabilidad y la imprevisibilidad en el entorno externo, ya sea en tiempo real o fuera de línea. Esto hace que la IA de apoyo al aprendizaje automático juegue un papel cada vez mayor en las ofertas de software donde los sistemas de ejecución se benefician, por ejemplo, con procesos optimizados, mantenimiento predictivo o sujeción basada en la visión.
Esta tecnología ayuda a los fabricantes, proveedores de logística y minoristas que se ocupan de productos, pedidos y existencias que cambian frecuentemente. Cuanto mayor sea la variabilidad y la imprevisibilidad del medio ambiente, más probable es que los algoritmos de IA proporcionen una solución rentable y rápida, por ejemplo, para fabricantes o mayoristas que tratan con millones de productos diferentes que cambian regularmente.
La IA también es útil en entornos en los que los robots móviles deben distinguir entre los objetos o las personas que encuentran y responden de manera diferente.
5. Segunda vida para robots industriales
Dado que un robot industrial tiene una vida de servicio de hasta treinta años, el nuevo equipo tecnológico es una gran oportunidad para dar a los robots antiguos una «segunda vida».
Fabricantes de robots industriales como ABB, Fanuc, Kuka o Yaskawa cuentan con centros de reparación especializados en renovar o actualizar las unidades usadas de una manera eficiente en recursos.
Esta estrategia de “preparados para reparar” para los fabricantes de robots y sus clientes también ahorra costos y recursos. Ofrecer reparación a largo plazo a los clientes es una contribución importante a la economía circular.