1. Confidencialidad
Este pilar guarda relación con la privacidad de los datos abarcando, de este modo, las acciones que se emprenden con el objetivo de asegurar que la información confidencial y sigilosa permanezca protegida y no se robe mediante ciberataques, acciones de espionaje o cualquier otro delito informático.
Si el área responsable de gestionar la seguridad de la información echa a un costado las medidas de protección de los datos críticos, la empresa puede verse seriamente afectada como ocurrió en varios ejemplos de incidentes recientes.
Pero, al final, ¿existe una fórmula mágica que garantice la protección de los datos?
No hay una receta infalible para garantizar el 100% de protección. Sin embargo, existen muchas acciones preventivas que pueden llevarse a cabo con la intención de incrementarla como permitir el acceso a la información únicamente a las personas autorizadas.
Esta medida requiere que la autorización del acceso se realice mediante la consideración de niveles jerárquicos, es decir, los colaboradores que ocupan puestos más elevados pueden ingresar a un mayor número de datos que funcionarios que actúan en puestos más bajos.
En efecto, una forma interesante de organizar la jerarquía es clasificando los datos de acuerdo con criterios específicos como el potencial de impacto en el caso de que caigan en manos de personas mal intencionadas. De esta manera, la empresa puede adoptar medidas más o menos rigurosas para proteger a la información.
Otro aspecto interesante es fomentar el desarrollo de los profesionales que lidian con los datos críticos llevando a cabo entrenamientos y capacitaciones que orienten acerca de las mejores prácticas como evitar conectarse a la red corporativa desde un dispositivo personal o no compartir los datos sigilosos en lugares públicos.
En lo que concierne al uso de tecnología para incrementar la confidencialidad, es posible implementar sistemas de encriptado de datos, autenticación de dos factores, verificación biométrica, entre otros recursos que permitan detectar la identidad del usuario antes que acceda a la información.
2. Integridad
La integridad es el pilar de la seguridad de la información que se refiere al mantenimiento de la precisión y consistencia de los datos, así como de los otros sistemas corporativos durante los procesos o el ciclo de vida del negocio.
Bajo la perspectiva de este elemento, es importante que los datos circulen o se almacenen de la misma forma como se crearon sin que exista intervención externa para dañarlos, comprometernos o corromperlos.
Dicho en otras palabras,la integridad garantiza la veracidad de la información indicando que los datos no pueden alterarse sin autorización previa. No obstante, en el caso de que ocurra un cambio indebido, imprevisto o no planeado, la información puede afectarse de forma irreversible.
Entre las formas más eficientes de fortalecer este pilar, destacamos:
- Definir permisos para acceder a los archivos;
- Implementar sistemas de verificación para detectar alteraciones en los datos que puedan ocurrir en la red o en el caso de ocurrir fallas en los equipos u otros eventos no relacionados con la actividad humana;
- Utilizar checksum para verificar la integridad de los datos almacenados en diferentes medios durante un determinado período o enviados por canales con ruidos.